entre las piedras
y la tarde descalza
el polvo dolido.
Rotos cardos
parecen hilar
la tristeza
en la tibia maleza de las flores.
Formosa chasquea un silencio
en la sombra
pero en la vereda,
detrás de los muros
una luz, un roce, un giro
apenas sonríe
para nadie.
detrás de los muros
una luz, un roce, un giro
apenas sonríe
para nadie.